El simulador de barcos extremos para PC ofrece a los jugadores la oportunidad de experimentar la emoción y los desafíos de ser un capitán de barco. Desde navegar por tormentas traicioneras hasta enfrentarse a cazadores ilegales de ballenas, este juego sumerge a los jugadores en escenarios realistas y emocionantes. Las misiones están basadas en eventos reales, lo que le da un aire de autenticidad al juego.
Una de las características destacadas de Ship Simulator Extremes es su atención al detalle. Los entornos y lugares están meticulosamente diseñados, lo que permite a los jugadores explorar y navegar por configuraciones realistas de todo el mundo. Este nivel de realismo añade a la experiencia inmersiva de ser un capitán de barco.
Sin embargo, a pesar de sus cualidades inmersivas, Ship Simulator Extremes se queda corto en ciertas áreas. Los controles pueden ser torpes y difíciles de dominar, lo que lleva a la frustración y a una curva de aprendizaje pronunciada para los jugadores. Además, los gráficos están desactualizados y carecen del pulido de juegos más modernos. Esta estética retro puede atraer a los jugadores nostálgicos, pero puede resultar desalentadora para aquellos acostumbrados a títulos visualmente más impresionantes.
El juego en sí también puede volverse repetitivo con el tiempo. Si bien la experiencia inicial de navegar en un superpetrolero en medio de una tormenta perfecta o rescatar una isla de un desastre volcánico es emocionante, la falta de variedad en los objetivos de las misiones y escenarios puede dejar a los jugadores deseando más profundidad y variedad.
En cuanto a la calificación, Ship Simulator Extremes recibe un 3/10. Si bien ofrece una experiencia única y nostálgica para los fanáticos de los juegos retro, sus gráficos anticuados, controles torpes y juego repetitivo dificultan su disfrute general. Este juego puede ser una joya para aquellos que buscan una experiencia de juego vintage, pero puede no satisfacer las expectativas de los jugadores modernos que buscan un juego más pulido y dinámico.
