Divinity: Original Sin II para PC es un juego que emana el encanto y la profundidad de los RPG clásicos, transportando a los jugadores a un mundo repleto de aventuras y oportunidades. Larian Studios Games ha creado magistralmente un título que fusiona de manera impecable la crítica y el aprecio, mostrando su innato entendimiento de lo que hace que los juegos retro sean tan cautivadores.
En su núcleo, Divinity: Original Sin II cuenta con un sistema de combate profundo y táctico. Los jugadores tienen la libertad de abordar las batallas con estrategias únicas, utilizando una amplia variedad de hechizos, habilidades e interacciones ambientales. Este nivel de complejidad nos remonta a la edad dorada de los RPG, donde la toma de decisiones y la planificación cuidadosa eran cruciales para salir victoriosos. Es un refrescante contraste con el combate apretar-botones predominante en muchos juegos modernos.
Una de las características más destacadas del juego es su funcionalidad multijugador, que permite que hasta tres jugadores más se unan a tu aventura. Esta experiencia cooperativa añade emoción y camaradería, reminiscente de las clásicas sesiones de juego en el sofá. Cada jugador puede crear su propio personaje y juntos se embarcarán en un viaje a través de un mundo lleno de decisiones y consecuencias. Sin embargo, es importante destacar que solo un jugador puede ascender a la divinidad, lo que añade un elemento competitivo que mantiene las cosas emocionantes y garantiza la rejugabilidad.
Divinity: Original Sin II captura la esencia de los RPG retro no solo en su jugabilidad. Los gráficos, si bien no buscan un hiperrealismo, emanan un encanto nostálgico reminiscente del arte de píxeles clásico. El uso de colores vibrantes y atención al detalle en el entorno transporta a los jugadores a una época en la que la imaginación reinaba y los gráficos eran solo un medio para la mente. Esta fusión de tecnología moderna y estética retro es un testimonio del compromiso del juego de ofrecer una experiencia auténticamente retro.
Si bien Divinity: Original Sin II brilla en muchos aspectos, no está exento de defectos. La curva de aprendizaje del juego es pronunciada y la cantidad de información puede ser abrumadora para los recién llegados. La falta de una guía puede desalentar a aquellos acostumbrados a experiencias más dirigidas, pero para los entusiastas de los juegos retro experimentados, es un desafío bienvenido. Además, la narrativa del juego, si bien envolvente y ricamente desarrollada, puede en ocasiones resultar confusa y desviarse hacia tangentes que pueden alienar a algunos jugadores.
En conclusión, Divinity: Original Sin II para PC es una carta de amor a los juegos retro. Larian Studios Games ha creado de manera experta un título que combina a la perfección un combate táctico profundo, mecánicas de juego multijugador atractivas y una estética visual que evoca recuerdos de los RPG clásicos. Si bien puede tener sus defectos, el compromiso del juego de ofrecer una experiencia retro auténtica lo convierte en un imprescindible para cualquier entusiasta experimentado de los juegos retro. A pesar de su curva de aprendizaje pronunciada y su narrativa a veces confusa, Divinity: Original Sin II logra un equilibrio notable entre la crítica y el aprecio, ofreciendo un viaje inmersivo y nostálgico que seguramente cautivará a los fanáticos del género.