Wario: Master of Disguise para la Nintendo DS es un juego que evoca la nostalgia de los juegos clásicos mientras le da un giro fresco a la serie de Wario. Desarrollado por Suzak y publicado por Nintendo, este título ofrece una combinación única de plataformas, resolución de puzzles y mecánicas de dibujo.
En este juego, Wario se encuentra con una serie de televisión protagonizada por un hábil ladrón con una varita mágica que puede cambiar su apariencia. Siendo el personaje travieso que es, Wario decide robar la varita y tomar el control del programa. A medida que los jugadores progresan en el juego, acompañan a Wario en sus aventuras en lugares exóticos como un crucero de lujo, ruinas acuáticas y una pirámide egipcia.
Una de las características sobresalientes de Wario: Master of Disguise es la habilidad de dibujar los disfraces de Wario. Al dibujar símbolos en la pantalla táctil de la DS, los jugadores pueden transformar a Wario en diferentes atuendos que le otorgan poderes únicos. Ya sea la agilidad del Wario Ladrón o las capacidades de explosión del Wario Cósmico, estos poderes añaden un dinamismo emocionante a la jugabilidad.
El juego también abraza la sensación nostálgica de los juegos de plataformas clásicos al incorporar controles con el lápiz óptico para utilizar los poderes de Wario. Este uso innovador de la pantalla táctil de la DS añade un nivel adicional de interacción a la experiencia de juego, brindando a los jugadores una forma fresca de interactuar con el juego.
Con diez misiones repartidas en nueve ubicaciones diversas, Wario: Master of Disguise ofrece una cantidad decente de contenido para explorar. Sin embargo, hay que señalar que la calidad general del juego no está a la altura de las expectativas. Aunque el concepto es intrigante, la ejecución se siente insatisfactoria. Los controles pueden ser ocasionalmente incómodos y poco receptivos, lo que lleva a momentos frustrantes.
Además, los mini-juegos basados en el lápiz óptico que se utilizan para abrir cofres presentan un resultado mixto. Si bien son disfrutables al principio, rápidamente se vuelven repetitivos y no proporcionan el mismo nivel de satisfacción que la jugabilidad principal.
A pesar de estas desventajas, Wario: Master of Disguise aún tiene cierto atractivo para los fanáticos del personaje y los entusiastas de los juegos retro. El encanto nostálgico y las mecánicas de dibujo únicas aportan un nivel de novedad a la experiencia. Sin embargo, es crucial acercarse al juego con expectativas moderadas para evitar decepciones.
En general, Wario: Master of Disguise en la Nintendo DS recibe una calificación de 3 sobre 10. Si bien muestra algunas ideas interesantes y elementos nostálgicos que recuerdan a los juegos clásicos, la ejecución y el disfrute general se ven obstaculizados por problemas de control y mini-juegos repetitivos.