Driven para Game Boy Advance intenta recrear la acción y el drama de alta velocidad de la película del mismo nombre protagonizada por Sylvester Stallone. Con sus ocho equipos y 12 pilotos, cada uno con sus propias personalidades y estilos de conducción únicos, tiene como objetivo sumergir a los jugadores en el emocionante mundo de las carreras profesionales. A medida que los jugadores asumen los roles de Jimmy Bly y Joe Tanto del 'Equipo Espíritu', deben navegar a través de una competencia despiadada contra sus rivales, Beau Brandenburg y Max Manley, para salir victoriosos.
Si bien el concepto suena prometedor, la ejecución se queda corta. Los gráficos y la jugabilidad de Driven carecen del acabado y la elegancia vistos en otros títulos de Game Boy Advance de la época. Los visuales se ven pixelados y carecen de detalle, sin capturar la emoción e intensidad que uno esperaría de un juego de carreras. Además, los controles se sienten torpes y poco receptivos, lo que dificulta maniobrar los vehículos con precisión.
Un aspecto que puede llamar la atención de los entusiastas de los videojuegos retro es la sensación nostálgica que evoca Driven. El juego evoca una época en la que los juegos con licencia de películas eran comunes, capturando la esencia de una era pasada en la historia de los videojuegos. Desafortunadamente, la nostalgia por sí sola no puede salvar este título de sus deficiencias.
Otra falla en Driven es su limitada capacidad de rejugabilidad. Una vez que los jugadores han experimentado la historia y completado las carreras, hay poco incentivo para volver a jugar. La falta de modos adicionales o contenido desbloqueable hace que sea una experiencia olvidable a largo plazo.
A pesar de sus fallas, Driven ofrece una experiencia de carreras moderadamente entretenida para los fanáticos de la película o aquellos que buscan una dosis rápida de nostalgia. La inclusión de personajes conocidos de la película agrega un nivel de familiaridad e inmersión, lo que puede ser atractivo para algunos jugadores. Sin embargo, para aquellos que buscan un juego de carreras verdaderamente satisfactorio en Game Boy Advance, hay mejores opciones disponibles.
En conclusión, Driven para Game Boy Advance no alcanza su potencial. Aunque intenta capturar la emoción y el drama de la película, sus gráficos mediocres, controles poco receptivos y limitada rejugabilidad lo convierten en una elección mediocre para los entusiastas de las carreras. Los entusiastas de los videojuegos retro pueden encontrar algo de diversión en su encanto nostálgico, pero en última instancia, hay mejores juegos de carreras disponibles en esta plataforma.